jueves, 31 de agosto de 2017

Hombre en cuerpo de mujer

Hace un par de años atrás conocí a alguien, una persona muy especial y a especial me refiero con diferente, diferente a mí en muchos sentidos.
Quería y quiero aprender de ella acerca de su forma de pensar y de ser, no para imitarla, pero me causa una profunda curiosidad.
Ella es una mujer fuerte, que enfrenta al mundo siempre con una sonrisa… aunque eso es para la mayoría, pero con sus cercanos y los que realmente la conocemos, hemos visto sus peores lados  aunque evite mostrarlos.
Lo que más me causa curiosidad de ella, es la forma  que tiene de pensar tanto de los hombres como de las relaciones amorosas en general. Muchas veces le he dicho que ella es un hombre en cuerpo de mujer, por eso el título de ésta historia. Me ha tocado ver de cerca muchas cosas en relación a ella. Juegos con hombres, en los cuáles no se involucra sentimentalmente porque simplemente no le interesa. Le cuesta darse con la gente y más aún con ellos, creo a veces que por eso su comportamiento. También he pensado que puede ser por desconfianza o simplemente por hacerse la fuerte, no lo sé.
Siempre tiene a la persona que quiere en la palma de su mano, pero no los deja entrar más allá - - “¿relación seria? Puf, para que… no es necesario”.
¿Sentimientos? ¿Qué es eso? Es más, cuando una persona se interesa en ella, tiende a jugar al coqueteo, a las bromas, puede provocar en ocasiones ilusiones en otras personas, pero simplemente es así, en ese aspecto no mide ciertas consecuencias, pero cuando a veces dice tener ganas de tener alguna relación, simplemente no se da, porque no se fija en la persona  correcta, porque por su personalidad o su forma de ser, asusta a los hombres. Miren que extraño, una mujer asustando a un hombre, simplemente porque de forma tranquila ella expresa que no le interesa el amor.
En general las mujeres, me incluyo, creen que en el romanticismo, en el amor, en que se pueda formar algo real con alguien. Pero cada vez que al menos yo estoy en algo, algo pasa, la desilusión viene y una vez más me derrumbo. Por lo mismo quizás me gustaría aprender a separar sentimientos de otras cosas, quisiera aprender un poco más de ella. Pero luego me arrepiento porque: ¿Qué es la vida sin amor? ¿Qué es la vida si no nos permitimos sentir? ¿Si no nos permitimos sufrir? En la vida, hay que llorar, hay que sufrir, hay que lamentarse, gritar de dolor si es posible para sacar todo afuera. Como también hay que reír, soñar, ilusionarse, coquetear, pensar.
¿Qué es la vida si no vivimos eso? ¿Qué es vida si todos fuéramos fríos y calculáramos cada uno de nuestros movimientos y tuviésemos control absoluto de nuestras emociones? NADA, eso para mí, no es vivir.
Hay que arriesgarse, se que da miedo entregarse a alguien por completo, entregarse de tal manera que le pasas tu corazón y en ese momento le das el completo derecho a que haga lo que quiera con él. Si, es terrorífico darle el poder a una persona para que con una palabra o un mal acto pueda quebrarlo en mil pedazos, pero créeme, todo se supera y  vale la pena sentir.
Tengo miedo, me da miedo por ti, me da miedo que por cerrarte tanto, termines aburriendo a hombres que quizás te quieren de verdad y tú nunca vas a descubrir si es así o no y finalmente por dudar, te quedes sola. Temo por ti que no vivas esas emociones, porque eso es VIDA.

Sé que tú me has enseñado eso, pero ponlo en práctica y juégatela siempre por lo que te importa, aunque sólo sea un tonto amor, quizás, puede ser el mejor amor de tu vida.

jueves, 24 de agosto de 2017

Una confesión

Hace un tiempo conocí a una niña, muy simpática por lo demás, tomamos muy buena onda pero no era mucho el tiempo que llevábamos conociéndonos y  ya conversábamos mucho, nos contábamos algunas cosas y etc… típico de cuando te estás haciendo amiga de alguien.
Un día la vi media acongojada y me acerqué a conversar con ella para saber que le pasaba. A todo esto yo siempre he sido una persona muy abierta de mente que puede no compartir ciertas ideas o pensamientos pero los entiendo y aconsejo igual o ayudo como puedo.
La cosa es que me cuenta que tiene un drama amoroso. Hasta ahí, todo normal.  Me contó todo el problema y después me dice: “me comí a una mina y supo” y yo quedé como “whaaat” y dejé que terminara su historia porque no me dio para preguntarle nada más hasta que terminó de contarme todo. Entonces traté de ser lo más prudente para que no se sintiera incómoda y le dije muy relajada: “a ver… pero es que no entiendo, ¿te gustan las minas?” y ella como algo tímida aunque no sé si tímida porque igual tiene una personalidad súper fuerte, pero algo rara me dice: “mmm si” y yo relajada comprendí todo el tema y ahí me dice que claro, estaba así porque no sabía con quien hablarlo, porque no todos le daban confianza y ella había notado en mí en el poco tiempo que me conocía que era una persona de mente abierta más relajada a la que podía contarle esto.
Agradezco esa confianza… ahora con el tiempo se ha soltado más y ya se dice a ella misma que es fleta y bla bla bla, a mi no se me pasó por la cabeza decirle de esa manera porque pensé que podía ser ofensivo pero ya hablamos de todo con total naturalidad. Ahora ella tiene su pareja y cada día me encariño más con ella y con sus historias y con la confianza que me dio. (a todo esto contando esta historia no estoy faltando a su confianza, ella me autorizó a escribirla).

Así que eso, tengo una amiga lesbiana de la que me siento orgullosa de que sea así y ojalá algún día vaya por la vida diciéndolo sin sentirse extraña por lo que alguien pueda pensar de ella. 

jueves, 17 de agosto de 2017

Mis cuatro pasteles

Siempre he sabido que soy una persona asquerosamente enamoradiza, de hecho todos mis amigos se suelen reír mucho de eso. Miro a alguien y digo: “me enamoré” en  un segundo. Lógicamente no es que esté realmente enamorada, son sólo flechazos de la vida.
En fin, ese no es el punto, el punto es que además de ser enamoradiza en ese sentido, también lo soy cuando estoy con alguien. Nunca he tenido una relación seria de pololeo, pero si he tenido cuatro “pseudas” relaciones… creo que una no alcanzó ni para pseuda pero se entiende, he estado con cuatro personas. Cada uno de ellos muy diferentes en personalidades pero con algo en común, son el prototipo de hombre que no suelen tener cosas serias y que una jura que los va a cambiar.  “Ilusa” me he dicho a mi misma muchas veces cada vez que todo se iba a la punta del cerro.
Suelo ser una mujer paciente, que independiente de todo da espacio, no presiona, no exige y creo que ahí es donde está el gran problema, pareciera ser que a los hombres les gustan las minas locas.
Hoy escribiré acerca de éstas personas tan distintas y tan parecidas a la vez, todos con algo en común: 
1) El mujeriego: Un clásico, creo que todas conocen este tipo de hombre, encantador al principio, qué dice cosas lindas, te cautiva, hasta que logra su objetivo. Luego comienza a desaparecer o puede que aparezca y desaparezca, escribe de vez en cuando como para que uno siga ahí, ilusionada pero a su vez no hace nada porque todo avance.
Depende de que tanto uno aguanta para que él siga ahí. Yo aguanté 1 año y un poco más. Hasta que dije basta, cuando me di cuenta que no quiso nada más serio conmigo, comencé a culparme, pensé que era yo el problema y no, no era así, era él. Hasta el día de hoy llama, yo tenía 18 cerca de cumplir 19 cuando conocí a esta persona. Era un pollito, algunos pueden pensar que ya estaba grande, pero no, yo siempre fui muy niña, comencé a tomar alcohol a esa edad recién, a salir, etc. Antes de eso nada, solo estudio, me revolucioné cuando entré a la Universidad. En fin, hoy qué tengo 23 años aún se hace presente ¿Por qué? No tengo idea porque ya no me interesa nada que tenga que ver con él, o sea me he juntado, buena onda… soy cero rencorosa a pesar de todo el daño que me hizo pero lo que me molesta es que a pesar de la buena onda cada vez que tiene oportunidad molesta y tener algo más allá con él, mmm no, ni ahora ni nunca más.
Hasta el día de hoy dice que me quiere, claro que no como pareja creo yo, pienso que es un cariño gigante quizás porque a pesar de todo siempre fui buena con él, pero yo no sé si siento igual.
2) El Mujeriego tierno/amigo: Cuando entré a la U lo conocí a él, era de otra carrera, otra facultad y todo, pero teníamos el mismo grupo de amigos. Así nos conocimos. Estaba saliendo de mi primera “pseudo” relación cuando lo conocí, en ese sentido me ayudó mucho, literalmente el dicho de “un clavo saca a otro clavo” sirvió. Hasta ahora que escribo de él me saca una sonrisa, no porque sienta amor si no porque me causa ternura hasta el día de hoy. Él es un buen niño, pero mujeriego, y lo conocí así, sabía en lo que me estaba metiendo cuando comenzó a gustarme. Salíamos a un pub muy conocido para los que estudian en la Católica “DTH” era el lugar de encuentro con nuestros amigos y él siempre estaba ahí. Sus ojos verdes/pardos me encantaban, su sonrisa también, lo simpático que era, todo lo que me hacía reír, pero lo que más me gustaba era lo nerviosa que me ponía cuando lo veía. Empezó un jugueteo, luego pasaron más cosas en las que no voy a entrar en detalle. Pasó un lapsus aproximadamente de un año que estuvimos “juntos” donde pasaba mucho tiempo en que no pasaba nada pero siempre que no veíamos algo había, fuera de todo me caía bien, me hacía reír, me distraía, etc. Pasaron muchas historias con él, muy divertidas, más adelante quizás cuente una por una, pero hasta el día  de hoy hablo con él, somos “amigos” no puedo decir amigos amigos, pero nos llevamos bien, nos reímos, nos molestamos, etc, pero todo en buena onda, él está en otra pololeando, yo en otra también con mis asuntos, pero de él tengo un muy buen recuerdo, fue un muy buen remedio en su momento.
3) Mi amigo mujeriego: Aquí no entraré mucho en detalles, para los que han leído el blog, si es que recuerdan la historia “un mal recuerdo” bueno, es él, mucho más no tengo para decir, deben leer esa historia y sabrán, porque repetirla me da lata, sólo lo puse porque es uno de los cuatro.
4) El mujeriego que no sabe que lo es: el último de la lista, este hombre es mujeriego pero no sabe que lo es, o se hace el tonto. Él le llama “amor libre”, esto es chistoso. No voy a decir cómo nos conocimos porque quedaría demasiado en evidencia.
Él es un encanto de hombre, pero tiene la filosofía de vida de darle amor al mundo. Ahora que lo escribo de hecho estoy con ataque de risa de lo ridículo que suena, pero lo más ridículo es que esa filosofía de vida se la creí. Weon, ¿pueden creerlo? La creí, fue tan convincente en como hablaba el tema, que yo le creía, luego llegaba a la casa a analizar todo lo que hablaba con él y me decía a mí misma “no po wn, no está bien… si le gusto y quiere estar conmigo tiene que ser sólo conmigo”. Él hablaba de no aferrarse a nadie, que eso no era amor, hablaba de la libertad, de que los celos son enfermos, etc… en algunas cosas estaba de acuerdo, pero en otras no.
Bueno en resumen, “me cagó” con su ex, pero claro, cuando me contó, porque sí, él me contó lo que había pasado, ni si quiera lloré, me dio risa porque dijo: “pero si sólo le di amor, es mi amiga, hay que darle amor al mundo, sin amor no somos nada” y yo no atinaba a nada. O sea ahí sólo le dije que chao, pero el chao me duró hasta que de nuevo me convenció con su discurso. Ya después pasaron más cosas como por ejemplo lo veía darse besos en la boca con sus amigas delante de mí y adivinen que decía… “pero si son mis amigas” o sea, era una wea súper natural, para él, no para mí…
En medio de todo lo que "teníamos" un día me cuenta que va a salir. Yo muy relajada porque no tengo dramas con eso entonces le digo: "ya, pásalo bien, bucha cuídate, usa preservativo" en broma lógicamente, pensando que él me iba a decir: "no tranqui, relájate" o que se yo, pero en vez de eso me dice: "no, si, si ando con uno no te preocupes" jajajajajajajaja ctm wn, no supe que decir po, me la hizo...
Sorry que en este texto se me salgan los garabatos pero es inevitable, y de verdad me da risa, o sea en el momento sentía entre risa y odio, pero ahora sólo me río, me cae bien el wn jaja es simpático, es un tipo encantador, que tiene tema y muchas cosas positivas, pero una de esas cosas que él ve como positivas yo no lo veía así, así que no, no funcionó y la verdad es que nunca iba a funcionar. Todavía hablamos a veces, por cosas de la vida, además estamos obligados a seguir viéndonos, pero todo fue siempre en buena onda y hasta el día de hoy es así. Le tengo un cariño infinito y siempre va a ser así, aprendí de otro hombre más.
Y eso, para finalizar como podrán ver me ha tocado cada pastel en la vida, pero de esos pasteles he aprendido, me he reído y lo he pasado bien con todos. Pero de los cuatro sólo de dos tengo recuerdos lindos. El 1 es nada y al 3 aún lo quiero mucho pero fue más el daño que hizo que lo bonito que me dejó, lean su historia y sabrán por qué, bueno, por algo hice una historia solo dedicada hacia a él, fue el más importante pero el más doloroso.